Los bancos reducen su red y su plantilla a ojos vista. Pero esto no impedirá que ganen presencia en la venta de pólizas. Así lo opina Unespa. Las entidades de crédito controlan más del 70% del ramo de vida y crecen con fuerza en daños. El riesgo es que un siniestro mal resuelto pueda contaminar el vínculo del cliente con su entidad financiera.
Caen chuzos de punta sobre la banca: morosidad al alza, márgenes renqueantes, nuevas exigencias de provisiones y capital, así como recortes de plantilla y de red. En plena vorágine de vicisitudes, hay un campo donde el viento sopla a favor para las entidades de crédito: el seguro. Al menos así lo considera Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa.
"Estoy plenamente convencida de que la contribución de las redes financieras a la venta de productos aseguradores continuará siendo positiva aun cuando la capacidad instalada por parte de la banca se encuentre en proceso de reconsideración", afirmó la responsable de la patronal del seguro en un seminario organizado por la APIE el pasado lunes.
Bancos, cajas y cooperativas sumaban 45.662 oficinas al cierre de 2008. Desde ese pico, la capilaridad de su red no ha dejado de menguar. El pasado septiembre, mantenían 40.390 locales abiertos. La crisis ya se ha llevado por delante 5.272 sucursales, según el Banco de España. El 12% de la red en su momento de máximo esplendor. Y el ajuste no ha acabado.
La severidad de los cierres no ha frenado, aun así, la fuerza de venta de pólizas de bancos y cajas. De hecho, su presencia no deja de crecer. Las entidades de crédito han mantenido en los últimos cinco años su dominio del seguro de vida, donde copan más del 70% de los recursos gestionados. Pero es en las pólizas de daños donde anotan mayores progresos. Su peso en el ramo de generales ha subido en dos puntos y medio porcentuales entre 2006 y 2010. Ya canalizan cerca del 10% de la facturación.
Los bancos han acaparado el negocio de vida por su similitud con los productos financieros y en no vida destacan en hogar por su vinculación a los préstamos hipotecarios. Francisco Betés, presidente de la consultoría IMAF, reconoce el potencial de crecimiento de los bancos en la venta de pólizas y cree que solo podría verse ralentizado "por un cambio en la regulación que penalice la venta cruzada de productos bancarios y aseguradores, como se ha dado en Reino Unido y Canadá". Luego añade otros factores a tener en cuenta. "Todavía hay que comprobar si un siniestro mal resuelto puede contaminar la relación con el cliente y provocar que rompa con el banco".
Desde Amaef, la Asociación de Mediación Aseguradora de Entidades Financieras, afirman que "hay una gran disparidad en la importancia que dan al seguro unos bancos y otros". En el sector se reconoce ampliamente a La Caixa como un grupo donde el seguro y el ahorro previsión ha tenido siempre un peso muy relevante. No en vano, en catalán se la identifica como La Caixa de Pensions. Y ahí están las cifras: Vidacaixa aporta el 24% del beneficio. Santander y BBVA también son casos destacados.
González de Frutos insiste en que "para las aseguradoras todos los canales de distribución de productos son importantes", pero la realidad es que la banca crece a costa de los mediadores que venden pólizas muy estandarizadas (autos, hogar, etc.). Los grandes corredores (Aon, Willis, Marsh o March Unipsa) mantienen su mercado porque ofrecen soluciones a medida en gestión de riesgos a grandes clientes, mientras la venta directa es un segmento que, como la banca, va al alza.
Artículo escrito por: Eduardo G. Ercoreca
Publicado en cincodías.com el 07/03/2012